jueves, 29 de enero de 2009

The Interruption (Tintern)

Let us breathe in the air that surrounds hostile winds
and in passion declare what is out and within
of the world that consumes what is precious to us
while it laughs it assumes that we've fallen across
a great path that encounters fat walls made of sin:
naked people hear blood, promiscuity grins...
And while danger surrounds our small circle of peace
and intends to destroy what makes errors decease,
someone shouts and in pain we move closely to hear
greater winds from a breath that makes fearless men fear.
So our circle is small and I know most have gone
to find ways to make weak those of us that are strong.
And we still hear them mock while we offer and kneel,
As we breathe and inhale what is truth, what is real.

miércoles, 28 de enero de 2009

Siempre te amaré aquella noche

Siempre te amaré aquella noche,  
aquella en la que bailamos. 
Siempre amaré el tambalear de tu traje, 
marcando el paso, como agua hirviendo, 
intentando evadir el calor de tu cuerpo.   

Siempre te amaré aquella noche. 
¿Cómo no hacerlo? 
Había fuego en tu mirada hipnotizante, 
y una fuerza destructora en tus caderas, 
congelando en el acto el tiempo y tu persona, 
como si por un instante el universo suspirara, 
cediéndote su lugar como centro. 
Y por ese instante lo fuiste todo, 
el firmamento se reunió en tu mirada, 
disipando su energía en tu cercanía.   

Y tembló todo, 
el fin y el comienzo fueron uno, 
la realidad caía en pedazos a tu alrededor 
mientras mi mano recorría el infinito, 
la distancia obligatoria para alcanzar la tuya…   

Y se encontraron, nuestras manos, 
en un momento cósmico 
que sacudió el mundo de vuelta a la existencia,
y sentí como el aire me obligaba a respirar, 
devolviéndome a la vida por la fuerza.     

Y bailamos. 
Inconscientes de todo lo demás, 
bailé contigo y tu conmigo, 
inmunes al dolor y la preocupación, 
aislados de tiempo y espacio. 
Bailamos un momento a la vez 
con tu sonrisa de por medio, 
presentando tu figura, 
mientras tus ojos daban significado 
a la definición de lo que entonces 
pasaría a ser belleza.   

Bailamos así, con tu hermosura de por medio, 
con tu figura entre nosotros,
con la suavidad de tu piel 
escurriéndose entre tus manos, 
con la estela de luz que reposaba en tu pelo, 
con el calor de tu abrazo empujándome al delirio.   

Así bailamos la noche entera, 
entre pasos y pasos rozando en la locura, 
mientras el día, revolviendo cada vez más lento, 
se escondía tras la luna, 
regalándonos el tiempo que por derecho seria suyo, 
consciente de su impotencia, 
su existencia incomparable a la nuestra.   

Y así bailamos, 
bailamos, bailamos y bailamos…   

Y siempre te amaré aquella noche, 
sin importar cuan lejos la ilusión del tiempo nos lleve, 
volveré a ese momento, 
y te amaré completa nuevamente.   

Y así bailamos, 
bailamos, bailamos y bailaremos.

domingo, 25 de enero de 2009

De vez en cuando

(A Theresa, en esperanzas de que 
algún día encuentre lo que busca)

De vez en vez,
de cuando en cuando,
mi mente recuerda que te extraño...

Cada vez que el corazón se acelera,
cada vez que me falta el aliento,
cuando el sol invade por la ventana,
cuando el viento sopla entre las ramas,
cuando corre por mi espalda un escalofrío,
cuando lo dulce aparece entre lo agrio,
cuando el gozo se apodera de mis sentidos...

Cuando bebo, cuando lloro,
cuando canto, cuando río,
cuando pienso, cuando hablo,
cuando me duele, cuando hace frío...

Cada vez que me levanto,
cada vez que oigo un suspiro...

Cada minuto que esté consciente,
cada noche que no esté contigo.
Cada instante mientras esté vivo
dormido y despierto soñaré contigo.

jueves, 8 de enero de 2009

El mundo conspira en tu contra

Hoy en día ya solo te escribo de noche,
te visto de trajes fantásticos,
alucinando tu presencia y tu mirada
imaginándome un recuerdo bonito
en el que pueda fingirte.

Y así apareces ante mí,
hermosa y distanciada,
una visión de blanco
resaltada por la noche vacía,
digna de un espectro,
de mirada profunda,
terrible y fantasmal.

El mundo conspira en tu contra,
decidido a negar tu existencia.
Esconde tus pasos en las olas,
tus pisadas en sus murmullos
tus huellas, en su espuma.

Tu voz se la traga el viento,
aullándole a la luna
sus carcajadas victoriosas.

El mundo conspira en tu contra
te cubre de arena y neblina,
sonrojando mis ojos,
manteniéndote en secreto.

Me dejo llevar por tus labios,
me ofrecen un beso,
pero jamás llego a probarlo,
pues el mundo conspira en tu contra
y el frío ha helado mis sentidos.

Busco tus latidos con manos adormecidas,
pero el mundo conspira en tu contra,
y decide por la fuerza,
deshacer mi lucidez,
destruir mi realidad,
mi perfecta, hermosa e inexistente realidad.

El viento da paso al silencio,
llevando consigo la niebla y el frío.
Se queda la arena
para sostener las olas mudas,
y apareces nuevamente,
de rojo,
más bella que nunca
definiendo belleza con tu propia existencia.

Y entonces te hablo,
pero ya no me escuchas,
te toco, no me sientes
y miro tus ojos,
mi mirada perdiéndose en la tuya…

El mundo conspira en tu contra,
No. En la mía.
Te arrebató poco a poco.
Parte por parte.
Y al borde del delirio,
me presenta tu alma y destruye la mía,
blandiendo tus trajes como un hábil torero.
Clavando en mi espalda la locura,
atravesando mi cuello con ternura.

El mundo conspira en tu contra
engañándome hasta la demencia,
un asesino con estilo,
una muerte perfecta,
casi un suicidio,
me hechizó con tu mirada
y me atravesó con la vida.

Escurriéndola por mi rostro
con una sonrisa macabra.

Susurrándome al oído
que amé una mentira
nacida de tinta y papel.

Que tus besos fueron letras,
y tus caricias oraciones.

Que te he escrito cada noche,
conjurándote ante mí,

atándote a mis deseos,
estrellados como el anís.

Que realmente ame un recuerdo
de algo que nunca existió,
pues el mundo conspira en tu contra,
una bonita idea de lo que un día creí amor.

Tan solo una simple idea
de lo lindo de un adiós.